
Un término comúnmente utilizado en los casos de lesiones personales es el «deber de cuidado». En este artículo se analizará cómo se incumple el deber de diligencia y cómo esto puede dar lugar a un caso de lesiones personales.
El deber de diligencia desempeña un papel importante en la determinación de la culpa en un caso de lesiones personales. Una definición básica en inglés del deber de asistencia es «una obligación moral o legal de garantizar la seguridad o el bienestar de los demás». Cuando un individuo no cumple con la obligación legal de un deber de cuidado, se dice que ha incumplido su deber de cuidado y puede ser considerado responsable de cualquier daño o lesión que resulte.
Una persona puede responsabilizar a otra persona o entidad por el incumplimiento de un deber de cuidado mediante la presentación de una demanda por negligencia. La persona que presenta la demanda se denomina demandante y la parte demandada es el demandado. Sin embargo, en esta etapa, el incumplimiento de un deber de cuidado y la negligencia son sólo alegaciones o reclamaciones y deben ser probadas. Para que un caso de lesiones personales tenga éxito, el demandante debe probar cuatro elementos:
- Debe existir un deber de cuidado
- Debe haber un incumplimiento del deber de asistencia
- Daños y perjuicios
- Causalidad [Causa | Wex | US Law | LII / Legal Information Institute (cornell.edu)]
El término legal negligencia significa básicamente el incumplimiento de un deber legal de cuidado. El deber de cuidado y el incumplimiento forman parte de los cuatro elementos que debe probar el demandante. El deber de diligencia debe quedar establecido. Por ejemplo, en un accidente de tráfico, un conductor tiene siempre el deber de conducir de forma que garantice la seguridad de los demás usuarios de la vía pública. El demandante debe demostrar que se ha producido un incumplimiento de este deber de diligencia. Debe existir algún daño o lesión sufrida por el demandante; por lo tanto, los cuasi accidentes no suelen contar. Además, debe haber una relación entre el daño o perjuicio sufrido y el incumplimiento del deber por parte del demandado. Esto se denomina causalidad.
¿Cómo, entonces, el incumplimiento del deber de diligencia da lugar a un caso de daños personales? Considere esta ilustración: James conduce su camión. Un día llega tarde y conduce por encima del límite de velocidad. Annie va en su vehículo personal de camino a la tienda de comestibles y va ligeramente por debajo del límite de velocidad. James se salta un semáforo en rojo y choca con Annie. Annie sufre una lesión en la columna vertebral, un brazo y un tobillo rotos.
Annie puede optar por presentar una demanda por daños personales contra James. Para tener éxito en su demanda, Annie tendría que demostrar lo siguiente:
- James tenía un deber de cuidado. Todo conductor tiene la obligación de conducir con seguridad hacia los demás conductores y, en general, hacia cualquier persona que se encuentre en la zona.
- James incumplió su deber de diligencia: conducir por encima del límite de velocidad y saltarse un semáforo en rojo se considera un incumplimiento del deber de diligencia.
- Daño – Las lesiones de Annie cuentan como daño o perjuicio
- La infracción causó daños. Si James no hubiera acelerado y se hubiera saltado un semáforo en rojo, Annie no se habría lesionado.
Por lo tanto, Annie tiene un caso válido.
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